Cuando meditamos transcendemos el pensamiento y entramos en un estado de silencio
La
práctica de la meditación es utilizada desde hace ya miles de años, no
solo con el propósito espiritual, si no también, con el propósito de la
salud física y la intelectual, siendo principalmente favorecedora en estados de
ansiedad y estrés y excelente para el equilibrio emocional. Es de extremada relevancia que para encontrar ese estado de silencio interior tan necesario para poder entrar en contacto con tu ser interno.
La meditación se caracteriza principalmente por un estado de concentración y relajación de la mente.
Antes
de empezar a meditar es importante aprender a saber relajarse pues ese es el paso previo a la meditación, para que progresivamente poder dejar
de identificarse con el cuerpo y mente.
Aprender a soltar tensiones, para ello puedes aprender alguna técnica para relajarte, con simplemente sentarte en una silla o tumbarte, e ir visualizando y relajando todas y cada una de las partes del cuerpo, empezando por las extremidades e ir subiendo poco a poco hasta la cabeza.
También se puede utilizar técnicas para despejar la mente y canalizar las energías, dejando que los pensamientos lleguen y dejarlos pasar sin pararnos a reflexionar o analizar, no pensar sobre nada, dejando fluir todo lo que llegue a la mente, dejando entrar y salir los pensamientos desde la consciencia de no pararte a razonarlos.
Aprender a soltar tensiones, para ello puedes aprender alguna técnica para relajarte, con simplemente sentarte en una silla o tumbarte, e ir visualizando y relajando todas y cada una de las partes del cuerpo, empezando por las extremidades e ir subiendo poco a poco hasta la cabeza.
También se puede utilizar técnicas para despejar la mente y canalizar las energías, dejando que los pensamientos lleguen y dejarlos pasar sin pararnos a reflexionar o analizar, no pensar sobre nada, dejando fluir todo lo que llegue a la mente, dejando entrar y salir los pensamientos desde la consciencia de no pararte a razonarlos.
Otra
parte a desarrollar es la concentración, el saber mantener la mente tranquila esto ayudara a una meditación más profunda y
efectiva.
En la meditación se puede focalizar la mente en un único objeto, en el momento presente o en la respiración, o incluso en una imagen que te haga sentir paz, como por ejemplo visualizar un lugar tranquilo, un paisaje etc.
Es
una concentración donde se aprende a liberar la mente de su actividad normal para
enfocarla en nuestra conexión interior.
También
puedes concentrarte en la respiración tratando que sea profunda y
natural, intentando expulsar en cada respiración todo aquello que nos
agobia y nos aprisiona, soltando todos los apegos que nos limitan.
Podemos
crear en nuestra mente un espacio neutro, sin juzgar nada, creando un
espacio interior de serena contemplación, eso te proporcionara un estado
de armonía, equilibrio y conexión interior.
Para
que la meditación vaya siendo efectiva debe tener constancia, a través
de la constancia vas aprendiendo a saber cómo hacerla con más facilidad,
sin tener que estar tan alerta a los pensamientos. Esta práctica con el
tiempo va siendo más efectiva, poco a poco sentirás el bienestar y
veras los cambios que resultan de su práctica.
La
meditación es una herramienta que te puede llevar a un estado de
conciencia y entendimiento mas allá de lo físico, la meditación es un
estado natural de crecimiento, si el ego no lo interrumpe.
Es un medio de desarrollo de la personalidad, la bondad y de conocimiento superior, es una forma de conexión con lo divino y de des conexión mundana.
Es una experiencia que a través del silencio nos pone en contacto con nuestro Ser interior, con nuestra alma y con el universo.
Ejercicios de relajación:
Ejercicios de relajación:
Para poder meditar deberíamos primero
aprender a relajarnos, de forma que el hábito de saber parar la mente
ya esté integrado desde la tranquilidad. Para ello es necesario hacer de
este ejercicio diario de un tiempo que gradualmente iremos alargando
para ir acostumbrándonos a este estado de relajación mental y física.
Empezamos
por buscar un lugar agradable donde podamos estar cómodos y
tranquilos, podemos hacerlo en silencio o con música relajante,
podemos también poner velas y incienso para crear ese ambiente que nos
permita entrar en un estado relajado mientras vamos visualizando e
integrando las siguientes interiorizaciones:
1º Haremos un poco de estos ejercicios de relajación:
1º Haremos un poco de estos ejercicios de relajación:
Cierro
los ojos y presto atención a mi respiración, toda la atención se
encuentra en el proceso de respirar y en sus sensaciones. Cojo aire desde la nariz, lo llevo hasta el vientre, lo retengo y cuento hasta 5 con tranquilidad y suelto el aire por la boca muy despacio.
Mientras lo hago, no
modifico para nada mi respiración, simplemente observo…. como respiro
sin modificar para nada la forma de respirar…. tomo aire y echo aire,
simplemente sin más…. con toda mi atención centrada en el proceso de
respirar…. soy un observador que mira mi respiración como observaría la
llama de una vela…. sin identificarse con ella…. sin juzgar….
simplemente observo.
Respiro energética y silenciosamente, mantengo la intensidad de la respiración y me ayuda a tomar consciencia de que estoy respirando energía, lo que me facilita el poder entrar en estado de meditación. Repito este ejercicio unas cuantas veces.
Lilith
Respiro energética y silenciosamente, mantengo la intensidad de la respiración y me ayuda a tomar consciencia de que estoy respirando energía, lo que me facilita el poder entrar en estado de meditación. Repito este ejercicio unas cuantas veces.
Lilith